En mis cuadros cada línea representa un movimiento, un sentimiento y una energía, que transmito sobre el lienzo. Mi gran foco de inspiración es la naturaleza. Me intereso por todo lo natural, trabajo con la realidad de la naturaleza y mi propia interpretación. Utilizo la pintura como un camino para adentrarme en un mundo en el que no existen reglas ni razonamientos, otorgándome una libertad que no consigo encontrar en ningún otro lugar. Se trata de mi rincón escondido, en el que cualquier evento puede ocurrir y quiero transmitir este sentimiento a través de unos lienzos, en cuyo inicio aparece todo en blanco, para transformarlos posteriormente en una corriente de fuerza y energía.
En parte de la obra, utilizo enérgicas pinceladas que contrastan con colores tan vivos como el rojo y el negro, lo cual otorga una gran fuerza a los cuadros. A veces, no pretendo entender, sólo sentir. Puedo transfigurarme en algo, que sólo me lo permite este género y percibir inmensas sensaciones que estimulan mis sentidos.
Apuesto por formas libres, fusionando la percepción del mundo con un lenguaje personal. Intento dar un significado a un significante. Muchos de los detalles de mis cuadros surgen de alguna torpeza, la cual hace que la obra se vuelva única y libre. Me fascina la idea de que los errores y lo impredecible pueden llegar a ser lo más interesante de una obra. Me apasionan las diferentes texturas que se pueden adquirir con un mismo material, me encanta experimentar y adentrarme en ese mundo en el que todo está permitido.
A grandes rasgos, intento presentar una panorámica de diversos intentos de investigación. En ella revelo diversas formas de ensayar con el arte y su más profundo sentir. En definitiva, intento poner de relieve la importancia de una búsqueda a través del lenguaje artístico.
